Te espero para darte el azúcar de mi vida, deseo que puedas lamer el nectar escondido,
aquí, guardado para ti, dispuesta a todo
para ti.
Abro mis ventanas de par en par, para darte de la leche que sacie
y endulce tu paladar, rocio, aguas, manantiales.
Dispuesta y ansiosa
para ti.